La importancia de un trofeo

El pasado domingo el Atlético de Madrid y el Real Madrid hicieron historia al celebrar por primera vez una juntos una final de la UEFA Champions League. Un hito en la historia de esta competición ya que nunca antes se habían enfrentado en una final dos equipos de una misma ciudad.Como ya todos sabemos, el Real Madrid fue el vencedor que pudo levantar el trofeo, una copa muy especial que tiene una historia muy particular, ya que empezó siendo de lo más modesta.La copa actual no es igual que el primer trofeo, ya que fue un regalo que el diario L’Equipe hizo a la UEFA para la primera edición de la competición. Ya en 1966, el entonces Secretario General de la UEFA, Hans Bangerter, decidió encargar un nuevo modelo de trofeo que se adaptara a los gustos de los europeos de aquel entonces. Después de 340 horas de trabajo, el grabador Jörg Stadelmman presentó el resultado final: un trofeo de 74 cm de altura y un peso de 8 kilos, hecha de plata y que costó nada menos que 10.000 francos suizos. La última copa que fabricaba se encargó en 2006 después de que en 2005 se cumpliera el aniversario de los cincuenta años de vida de la competición, con unas medidas un poco diferentes: 73.5 cm de altura y un peso de 8.5 kg.No todos los ganadores de la copa pueden quedarse con ella en propiedad. Sólo aquellos que hayan ganado la Liga de Campeones en cinco ocasiones alternativas o tres consecutivas tienen derecho a quedársela. Siendo el sexto trofeo el actual, sólo cinco equipos tienen la copa de la Champions en sus vitrinas: Milán, Ajax, Bayern de Munich, Liverpool y el Real Madrid.La UEFA fabrica las réplicas que todos podemos ver en los museos de los equipos, ya que como hemos visto, no pueden quedarse con ellas en propiedad. Todas cumplen las mismas medidas y estándares ya que su fabricación está bajo patente. Para los aficionados, la tienda oficial de la UEFA distribuye sus propias réplicas que nada tienen que ver en tamaño con la original ya que suelen ser de unas medidas de en torno a 5 cm por 10 de altura.Una copa que con el paso de los tiempos ha ido tomando personalidad propia por sus años de historia y por representar al principal torneo del fútbol europeo. Un trofeo que en España fue bautizada como La Orejona, un apodo que hizo popular el comentarista deportivo Luís Omar Tapia por sus grandes asas ovaladas que sólo pueden tocar los campeones de cada edición.Foto Creative Commons Flickr