La mayoría de las personas que practica un deporte lo hace por el placer de divertirse con otras que comparten ese mismo interés, pero quien lo practica a un nivel más profesional puede llegar a tener muchísima presión por ganar o superar cierta competición que puede conllevar estrés y afectar en el rendimiento deportivo. Para intentar calmar este estado de estrés y que no nos afecte en el desarrollo de la competición deportiva y en su resultado hay ciertas técnicas y ejercicios de relajación que podemos realizar previos al partido.
- Respiración profunda: En un lugar tranquilo siéntate e inspira lentamente por la nariz llenando los pulmones por completo. Aguanta la respiración unos segundos y luego espira lentamente. Este ejercicio lo puedes repetir cinco veces seguidas para conseguir mejor resultado.
- Relajación muscular: Contrae fuertemente un grupo de músculos, mantenlos tensos durante cinco segundos y luego relájalos. Este ejercicio es recomendable repetirlo cinco veces con distintos grupos musculares.
- Visualización: Cierra los ojos y piensa e imagina un lugar o situación del pasado que te transmita paz y tranquilidad. También puedes intentar visualizar el éxito, a uno mismo haciendo un buen pase, metiendo un gol, encestando una canasta, etc. Este ejercicio ayudará a reforzar la confianza en ti mismo y disipar tensiones.
- Pensamiento positivo: Aleja los pensamientos negativos y céntrate en los positivos que te ayudarán a mantener la motivación y dejar de lado las tensiones.
A veces lo importante es centrarse en algo completamente diferente que despeje la mente y distraiga de la competición para que la mente no se centre únicamente en lo que tiene que conseguir o lo importante que es la competición y así no genere tanto estrés.Además, hay otros aspectos que puedes tener en cuenta para intentar sobrellevar el estrés:
- Aliméntate bien y duerme las horas necesarias por la noche, sobre todo antes de la competición o partido.
- Practica las técnicas de relajación mencionadas anteriormente. No sólo antes de cada partido o competición sino también de vez en cuanto para acostumbrar al cuerpo.
- Practica alguna otra actividad o deporte distinta del deporte que te crea el estado de ansiedad. Sal a caminar, ves al cine, da un paseo en bici, escucha música…
El simple hecho de competir puede llevar a situaciones de estrés en algunos jugadores, pero ahí también influye cómo es cada persona y de qué manera sabe llevar o canalizar la tensión previa al partido. Está claro que ganar una competición es la recompensa más estimulante para cualquier jugador, pero lo importante es disfrutar del partido. Hay otras recompensas que también pueden ayudar a tranquilizar o calmar a los jugadores tras una competición deportiva, como pueden ser la entrega de una copa o trofeo o el simple reconocimiento con una medalla deportiva. El deporte sirve para alimentar la autoestima y desarrollar tanto habilidades sociales como aprender a trabajar en equipo por lo que lo importante es aprender a disipar las tensiones y el estrés para pasarlo bien mientras realizamos ejercicio y entrenamos en nuestro deporte favorito. Foto Creative Commons Flickr